sábado, 30 de octubre de 2010

CAPITALISMO


SEGÚN EL CIENTÍFICO SOCIAL BRITÁNICO DAVID HARVEY

EL MERCADO LIBRE Y DESREGULADO ESTÁ DESTRUYENDO LAS DOS FUENTES PRINCIPALES DEL BIENESTAR SOCIAL: LA TIERRA Y EL TRABAJO

POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ
Buenos Aires


David Harvey, uno de los más connotados intelectuales de la izquierda anglosajona, y un geógrafo y urbanista de prestigio mundial fue el conferencista central del IV Encuentro Internacional de Economía Política y Derechos Humanos, organizado por la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo de Buenos Aires.

Su visión crítica de la crisis capitalista desde su óptica europea y norteamericana da luces respecto del límite al que ha llegado el mundo por culpa de un sistema codicioso y depredador que no tiene límites.

Harvey es conocido además por sus formulaciones en torno al Derecho a la Ciudad y a la Acumulación por desposesión. En la capital argentina se detuvo para explicar ésta última.

Autor de varios trabajos ya clásicos sobre urbanismo y la dinámica espacial del capitalismo, cuenta también con trabajos de investigación que constituyen contribuciones importantes a la teoría económica. Ha escrito una obra de referencia en el campo de la crítica cultural: La condición de la postmodernidad. Nació en 1935 en el Reino Unido. Se doctoró en la Universidad de Canbridge en geografía histórica, actualmente es profesor en la City University de Nueva York y catedrático visitante de London School of Economics.

El Observatorio Sociopolítico Latinoamericano www.cronicon.net, recogió sus planteamientos en la siguiente síntesis:

ACUMULACIÓN POR DESPOSESIÓN

Mi visión del neoliberalismo es la apropiación de un conjunto de ideas de Friedrich Hayek y Milton Friedman, según las cuales la libertad está garantizada con propiedad privada más fuerte, mercado libre y reducción del Estado. Esta retórica no es sino un mecanismo para la reestructuración y consolidación del poder de clase y, en este sentido, el proyecto neoliberal ha sido todo un éxito. Es una idea que reproducen los medios de comunicación, pero lo cierto es que lo aparente es muy distinto a la realidad.

El ajuste estructural fue condición del FMI para salvar la crisis de México en 1994, que en últimas es una intervención gubernamental porque los banqueros hicieron lo que se les vino en gana pero luego el rescate corrió por cuenta del Estado y, por ende, de los ciudadanos. Por eso las finanzas del Estado se disminuyen y que los ciudadanos se frieguen, como ha sucedido en Grecia, España y el estado norteamericano de California. Como resultado de la crisis fiscal viene la austeridad en perjuicio de los derechos básicos de la sociedad. Es decir, se ha protegido a los bancos y se ha destruido al pueblo.

Infortunadamente en algunos países del mundo el neoliberalismo que es un proyecto de acumulación y dominación, se ha profundizado y ha ganado fuerza. Sin embargo, el capital ha tenido dificultades para lograr rentabilidad por lo que ha acudido a la economía ficcional, a la especulación, además se enfrenta a serias limitaciones medioambientales, de mercado y de rentabilidad. No se puede olvidar que el surgimiento de la clase capitalista no dependió originalmente de su capacidad de generar excedente. Descansaba en su habilidad para apropiarse de éste, tratarlo como si fuera de su propiedad privada y enviarlo a circular en busca de mayor excedente. Mientras que el comercio, la banca y la usura proveen oportunidad de obtener beneficios, el capitalismo como un sistema social llega a depender de la formación de un proletariado y en el empleo del trabajo asalariado. No obstante, para el neoliberalismo los trabajadores han constituido un problema, pese que la crisis no fue causada por los sindicalistas.

Es que un mercado capitalista libre y desregulado solo puede sobrevivir destruyendo las dos fuentes principales del bienestar social: la tierra y el trabajador.

Necesitamos comprender el modo en que la deuda nacional y el sistema de crédito han sido, desde el comienzo, vehículos fundamentales para la acumulación primitiva, o para lo que yo llamo acumulación por desposesión.

Hay una cantidad agregada de acumulación a través de la desposesión que debe ser mantenida si el sistema capitalista pretende adquirir algún tipo de estabilidad. El desarrollo geográfico a través de la desposesión, en consecuencia, es un corolario de la estabilidad capitalista.

Pero esto habla solamente sobre una parte de la historia de la acumulación capitalista a través de la desposesión. La otra mitad mira de manera más cercana a la canibalización de bienes que va dentro del sistema capitalista mismo como acciones (tales como el capital financiero) que aprovechan oportunidades para apropiarse de bienes ajenos (tales como industriales o terratenientes) o como los territorios o las configuraciones regionales de capital: ciudades, regiones, estados, buscan adquirir o destruir los bienes de sus rivales a través de la competencia comercial y/o las maniobras geopolíticas incluyendo intervenciones militares y disrupciones.

COMPONENTES DE LA ACUMULACIÓN POR DESPOSESIÓN

Cuatro grandes módulos componen la acumulación por desposesión en tanto patrón capitalista dominante en la era neoliberal. El primero consiste en la privatización y mercantilización de recursos vitales en grados que las utopías negativas de la ciencia ficción no habían previsto, como por ejemplo, la comercialización del aire a través de la compra y venta de cuotas de emisión de gases, transformando en negocio la degradación medioambiental, o la privatización del ciclo vegetal por parte de transnacionales como Monsanto que por medio del patentamiento de semillas modificadas con el tiempo resultan irremplazables dada la modificación del hábitat.

El segundo módulo es la financiarización iniciada en los años setenta y ampliada en los noventa, pero que recién en 2008 dio lugar a una nueva crisis capitalista con graves consecuencia sociales.

Las turbulencias y derrumbes económicos gira el tercer módulo: la gestión y manipulación de la crisis, que en 2005 fue una trampa para transferir activos de la periferia hacia el centro del capitalismo. En la medida en que los activos valiosos pierden su valor en las crisis, son adquiridos por migajas a través de ellas. Se calcula el equivalente a 50 planes Marshall lo que ha sido transferido de la periferia a los acreedores del centro.

Las redistribuciones estatales es el cuarto módulo y tiene que ver con otras prácticas de desposesión fuera las mencionadas privatizaciones, mediante las cuales los Estados nacionales suelen ser agentes indispensables de la restauración plutocrática más contundente de la historia del capitalismo. Estas otras formas incluyen algunas paradojas particularmente visibles en Chile e Irak, donde la ola privatizadora a través de la cual se concretó la desposesión, abarcó casi todas las áreas, salvo el recurso madre (cobre y petróleo respectivamente) que siguió en manos de los Estado dadas las necesidades de fortalecer sus funciones de gendarme.

Cualquier teoría del desarrollo geográfico desigual dentro del capitalismo debe incorporar la acumulación y la devaluación a través de la desposesión como fuerza fundamental si quiere tener validez general.

CHINA, UNA GRAN SISTEMA DE PRODUCCIÓN

Si bien el modelo económico de China que le está permitiendo crecer a un 10% anual no puede ser permanente, esta nación constituye un gran sistema de producción. Hubo una huelga de los trabajadores gracias a la cual lograron un 30% de aumento en sus salarios lo que ha fortalecido el mercado interno.

A los países que tienen vínculos comerciales con China les está yendo muy bien, pero esta gran nación asiática puede ser el nuevo epicentro de la crisis. La gran pregunta es en dónde ser la próxima crisis.

Lo que comenzó siendo una exploración a tientas de nuevas ecuaciones sociales y productivas, adquirió una dinámica de desarrollo fabulosamente acelerada a partir de la neoliberalización del resto del mundo. En un comienzo, el Partido Comunista chino había abierto la puerta muy lentamente, a partir de las “cuatro modernizaciones” de Deng Xiaoping en 1978, y el experimento de Guandong que en 1987 volvió exitoso el perfil exportador por el lado de las ventajas comparativas. Pero luego, un desarrollo con dinámica autosostenida en China, cebado por el giro neoliberal del capitalismo avanzado, comenzó a disputar la tutela del proceso a la posibilidad de comando que se esmeraba por conservar el Partido. Este despegue económico con proyección en la económica global no puede explicarse con independencia de la liberalización de flujos capitalistas a partir de la década de 1990, provenientes del centro capitalista en busca de mercados, mano de obra barata y recursos naturales. Tres factores que, disponibles en proporciones chinas y coordinados por el Partido Comunista más fuerte que haya existido jamás, transformaron al país en el “centro de producción deslocalizada a gran escala” más grande del mundo.

Las contradicciones dinámicas en China son diversas y conciernen a distintas esferas de la realidad social. La capacidad de exportar parte de esas contradicciones al resto del mundo al modo del imperialismo social, parecen lejanas por el momento, más por el tamaño de la escala china que por falta de disposición a hacer valer la pretensión de fábrica global.

¡HASTA AQUÍ HEMOS LLEGADO!

Desde el punto de vista capitalista el mundo se está suicidando, por esa razón hay que crear un proyecto revolucionario alternativo al capitalismo que permita mejorar las condiciones de la gente, para afirmar que otro mundo es posible.

Que podamos salir de esta crisis sistemática del capitalismo por alguna otra vía depende, y por mucho, de la relación de fuerzas entre las clases sociales. Depende de hasta qué punto el conjunto de la población diga: “¡hasta aquí hemos llegado; hay que cambiar el sistema!”

No basta, por lo tanto, denunciar la irracionalidad del capitalismo. Es importante recordar lo que Marx y Engels apuntaron en el Manifiesto Comunista con respecto a los profundos cambios que el capitalismo trajo consigo: una nueva relación con la naturaleza, nuevas tecnologías, nuevas relaciones sociales, otro sistema de producción, cambios profundos en la vida cotidiana de las personas y nuevos arreglos político-institucionales. Todos esos momentos tuvieron un proceso de co-evolución. El movimiento anticapitalista tiene que luchar en todas esas dimensiones y no solamente en una de ellas como muchos grupos hacen actualmente. El gran fracaso del comunismo fue el no conseguir mantener en movimiento todos esos procesos. Fundamentalmente, la vida diaria tiene que cambiar, las relaciones sociales tienen que cambiar.

sábado, 23 de octubre de 2010

AMÉRICA LATINA


UNA AGENDA PARA UN PROYECTO TRANSFORMADOR EN LA REGIÓN

“LOS PROCESOS POLÍTICOS DE CAMBIO EN AMÉRICA LATINA O SE PROFUNDIZAN O LA RESTAURACIÓN CONSERVADORA ES INEVITABLE”: ATILIO BORON

POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ
Buenos Aires

La advertencia es categórica: o se profundizan los cambios en aquellos países de gobiernos progresistas en América Latina o la derecha con la complicidad y el apoyo de Washington retoma el poder para imponer su modelo represivo en lo político, y neoliberal en lo económico. Así analiza la coyuntura sociopolítica de la región el destacado sociólogo y politólogo argentino, Atilio Boron.

En desarrollo de dos charlas que dictó durante el Encuentro Internacional de Economía Política y Derechos Humanos organizado por la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo entre el 9 y 11 de septiembre en Buenos Airesy que recoge en esta síntesis el Observatorio Sociopolítico Latinoamericano www.cronicon.net, Boron hizo un pormenorizado análisis de la situación política del hemisferio, sus escenarios, las amenazas que enfrentan los gobiernos progresistas, y planteó una agenda para un proyecto transformador en las naciones latinoamericanas.

La lucha emancipatoria tiene que ser continental, dijo, y recomendó simultáneamente, avanzar en procesos integracionista como la ALBA, Unasur, el Banco del Sur, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe.

UNA INDEPENDENCIA CON MUCHA DEPENDENCIA

Con la autoridad académica que lo caracteriza, este científico social señaló que el proceso del bicentenario de la independencia de las naciones latinoamericanas es inconcluso y que uno de los mayores obstáculos es el imperialismo norteamericano con sus aliados locales, los grupos dominantes criollos.

“La lucha por la igualdad y la democracia es muy demorada. Es una independencia con mucha dependencia, no obstante que los avances en materia de resistencia a las políticas neoliberales en varios países de la región son muy positivos”, acotó.

Su condición de observador político, catedrático universitario y analista de la realidad socioeconómica de América Latina le permite tener una visión muy certera de los fenómenos sociales que vienen suscitándose a lo largo y ancho del continente. Ph. D. en Ciencia Política de la Universidad de Harvard, Magister en Ciencia Política de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) de Santiago de Chile, y Licenciado en Sociología con diploma de honor de la Universidad Católica Argentina de Buenos Aires, Boron cuenta además con una amplia experiencia como docente. Desde 1986 está vinculado con la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA), de la cual fue su vicerrector, es Investigador Superior del Consejo Nacional de Investigación Científica y Tecnológica de Argentina (CONICET). Entre 1997 y 2006 se desempeñó como secretario ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), ha sido profesor visitante de varias universidades del mundo (entre ellas, Columbia, MIT, UCLA) y actualmente se desempeña como director del PLED, el Programa Latinoamericano de Educación a Distancia en Ciencias Sociales del Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini. Autor de varios libros, entre los cuales se destaca "Imperio e Imperialismo", que obtuvo en 2004 el Premio honorífico de ensayo Ezequiel Martínez Estrada de Casa de las Américas. Por su acuciante actividad investigativa y sus profundos análisis de la realidad latinoamericana, en julio de 2009 le fue concedido el Premio Internacional José Martí por parte de la UNESCO.

LA BATALLA DE LAS IDEAS ES FUNDAMENTAL

En la guerra de los pueblos contra el neoliberalismo y la hegemonía norteamericana, Boron recuerda lo que dijera José Martí: “De pensamiento es la guerra que se nos libra; ganémosla a fuerza de pensamiento.” Es decir, dirigir esta guerra con criterio político es el único modo de ganarla, por eso, agrega, “la batalla de las ideas es fundamental para enfrentar la dominación ideológica, el control monopólico de los medios de comunicación y de las escuelas de economía”.

Pero al mismo tiempo, dice, se debe lograr coordinar la resistencia social para dar la batalla contra el capitalismo. “Los movimientos sociales y las fuerzas populares no pueden dar una lucha local, parcial y parroquial, sino que es necesario concretar una coordinación mundial de todas las resistencias a lo largo y ancho de todos los continentes”, explica.

Lo cierto, colige, es que frente a la crisis civilizatoria que enfrenta la humanidad, “el mundo no resiste un siglo más de explotación capitalista, porque sostener un sistema consumista como el que practica es insostenible”.

CUATRO REALIDADES SOCIOPOLÍTICAS EN LATINOAMÉRICA

Dentro del contexto latinoamericano, Boron sostiene que claramente se pueden determinar cuatro realidades sociopolíticas:

1.- Cuba, constituye la excepción en el continente; una revolución triunfante que ha construido un Estado de nuevo tipo y una sociedad no capitalista.

2.- Venezuela, Bolivia y Ecuador, cuyos gobiernos impulsan un proyecto radical de transformación social, política y económica pero aún en medio de un Estado capitalista y una sociedad burguesa. No hay solución dentro del capitalismo, es la convicción de estos gobiernos, algo que los distingue de los del siguiente grupo.

3.- Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, países gobernados por líderes de centroizquierda que no ponen en cuestión la ruta del capitalismo. Su acento está en el impulso de programas de amplio calado social y en un cierto posicionamiento internacional que, en ciertas circunstancias puntuales, los convierte en socios privilegiados de Venezuela, Bolivia y Ecuador.

4.- Países gobernados por la derecha: México, Colombia, Chile y Perú que mantienen y defienden el modelo neoliberal y son obsecuentes a los dictados de Washington.

AMENAZAS PARA EL PROCESO DE TRANSFORMACIÓN

Boron es reiterativo en que el principal obstáculo para el desarrollo socioeconómico de los pueblos de América Latina es la hegemonía norteamericana y sus aliados, las oligarquías locales que por proteger sus intereses tienen espíritu de cipayo.

A ello hay que agregar los gobiernos obsecuentes de Washington que en Latinoamérica son una piedra en el zapato para la integración regional como los de México, Colombia, Chile y Perú.

Con estos socios, el Departamento de Estado y el Pentágono dirigen su acción hacia “el control exclusivo de la gran cuenca amazónica, el corazón latinoamericano que alberga grandes riquezas en materia de petróleo, gas, minerales estratégicos, agua, biodiversidad y potencial alimentario”, sostiene este politólogo argentino.

PARAGUAY BAJO OCUPACIÓN

Además, Boron viene alertando sobre las acciones de ocupación que está desarrollando el gobierno norteamericano en Paraguay, sin que haya logrado despertar la suficiente solidaridad y compresión de la región respecto de lo que está ocurriendo en este país.

“Paraguay está ocupado administrativamente por Estados Unidos; sus agentes torpedean al gobierno de Fernando Lugo y han logrado parar en el Congreso de esta nación el ingreso de Venezuela a Mercosur, que es un proyecto de integración política y económica incompatible con los intereses a largo plazo de Washington”.

En efecto, explica Boron, “el gobierno de Lugo es un inaceptable estorbo para los designios estadounidenses en la región. Si bien hasta el momento Lugo se ha cuidado de mantener muy cordiales relaciones con la Casa Blanca y ha consentido el irritante protagonismo de la Embajada en los asuntos internos del Paraguay, un amplio espectro del establishment estadounidense lo percibe con mucha aprensión y lo sataniza como el peligroso bienhechor que, a pesar suyo, puede convertirse en el catalizador de procesos políticos mucho más radicales, al estilo de los que existen en la vecina Bolivia o en el más lejano Ecuador. En las afiebradas alucinaciones de los halcones del Pentágono y el Departamento de Estado, Lugo aparece como una suerte de Kerensky tropical que al igual que su predecesor ruso terminará abriendo la puerta a una insurgencia plebeya de incalculables proyecciones y grávida de serias repercusiones en la geopolítica regional. Esto es así porque Paraguay ocupa un lugar privilegiado para cerrar, desde el Sur, el anillo de bases militares que rodea la gran cuenca amazónica, fuente de toda clase de recursos energéticos, biodiversidad, minerales estratégicos y agua, sobre todo agua. Esa es la razón por la que dos bases ya se han instalado en ese país, en Pedro Juan Caballero y en Mariscal Estigarribia”.

AGENDA PARA UN PROYECTO DE TRANSFORMACIÓN

No obstante las múltiples amenazas de Washington y de sus lacayos en el hemisferio, Boron considera que la vía para seguir avanzando en los procesos reformistas y de emancipación está en su profundización.

Por eso su advertencia: “Los procesos políticos de cambio en América Latina o se profundizan o la restauración conservadora es inevitable”.

En ese sentido, el desafío de los gobiernos progresistas es mostrar resultados concretos en reformas sociales, políticas y económicas, por lo cual este politólogo se permite plantear una agenda de temas para un proyecto transformador América Latina que, a manera de enunciación, comprende:

- Repudiar y anular la deuda externa.
- Modificar los regímenes tributarios regresivos, condición necesaria para la reconstrucción del Estado destruido por las políticas neoliberales.
- Profundizar la distribución del ingreso.
- Volver a convertir en bienes públicos derechos esenciales como la salud, la educación, la vivienda, la seguridad social, la recreación.
- Recuperar los recursos naturales.
- Avanzar en los procesos de integración supranacional.
- Impulsar nuevas formas de democracia participativa, que supere las formas arcaicas de la democracia liberal.

No se trata de imponer un esquema uniforme, un modelo único de cambio, porque cada país tiene sus particularidades, sus tradiciones políticas y sus propios métodos para acometer las reformas. Parafraseando el poema de Antonio Machado, Boron concluye diciendo: “militante, no hay modelo, se hace el modelo al andar”.

viernes, 15 de octubre de 2010

ECONOMÍA


ENTREVISTA CON DIEGO BORJA, PRESIDENTE DEL BANCO CENTRAL DEL ECUADOR

CONTRARIO AL PRECEPTO NEOLIBERAL, LA POLÍTICA MONETARIA Y CREDITICIA DEBE SER FACULTAD DEL PODER EJECUTIVO

POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ

Buenos Aires

El cambio en la función del Banco Central del Ecuador ha sido fundamental para frenar los estragos sociales y económicos que venía causando el nefasto modelo neoliberal, gracias a la nueva Constitución de 2008 que impulsó a través de una Asamblea Constituyente el primer mandatario de este país andino, Rafael Correa Delgado.

“Ya el Banco Central no asume decisiones políticas y no está al servicio de los banqueros” como sucedió durante el periodo neoliberal, señala con vehemencia su presidente, el economista y ex ministro de Finanzas, Diego Borja Cornejo, quien fue expositor en el foro “el rol de la banca central en el desarrollo económico”, que se realizó en el marco del IV Encuentro Internacional de Economía Política y Derechos Humanos organizado por la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo de Buenos Aires, junto a sus colegas de Venezuela, Uruguay y Argentina.

“En Ecuador se viene operando un proceso de cambio en medio de un Estado capitalista y una sociedad burguesa”, explica Borja, y en lo que atañe a la política cambiaria y crediticia, señala que ésta por precepto constitucional es ahora “facultad exclusiva de la función ejecutiva que se instrumenta a través del Banco Central”.

CONTRA LOS INTERESES DE LA NACIÓN

En diálogo con el Observatorio Sociopolítico Latinoamericano WWW.CRONICON.NET, recuerda que fue precisamente esta entidad financiera estatal la que “secuestró” los ahorros de la población ecuatoriana en beneficio de los banqueros corruptos, algunos fugados a Estados Unidos, y otros, procesados actualmente por la justicia.

Al mismo tiempo, el Banco Central, en los aciagos años neoliberales, agrega, fue el artífice tanto de la sucretización de la deuda privada como de la pérdida de soberanía monetaria.

En efecto, durante el gobierno conservador del conspicuo presidente neoliberal Osvaldo Hurtado Larrea (1981-1984), el Estado ecuatoriano asumió entonces la deuda privada cambiando las obligaciones en dólares por obligaciones en sucres, según la paridad y el tipo de interés fijados a la firma del contrato. Así los actores privados, no tuvieron que soportar el costo del aumento de los tipos de interés y de la devaluación del sucre, la moneda que regía en este país.

Ese proceso, señala Borja, que puede considerarse como un subsidio a solo 95 poderosos beneficiarios (entre personas naturales y jurídicas) le costó al Estado ecuatoriano más de 1.682 millones de dólares. Es decir, se socializó la deuda privada de unos pocos influyentes ciudadanos, lo cual es injusto, ilegal e inmoral.

Por si lo anterior fuera poco, continua Borja, al Banco Central también le cabe responsabilidad en la dolarización de la economía ecuatoriana en enero de 2000, durante el gobierno del derrocado presidente Jamil Mahuad (1998-2000).

“En realidad, la ingenua y temeraria dolarización unilateral ecuatoriana constituyó un absurdo económico y geopolítico, fue tomada de forma apresurada en un momento de grave crisis y confundió torpemente los efectos con las causas de la crisis, ya que, la depreciación de la moneda fue consecuencia de la crisis financiera y no la crisis financiera consecuencia de de la depreciación. Además de lo anterior, en un nuevo atentado a la tan cacareada seguridad jurídica y al Estado de Derecho, la dolarización fue abiertamente inconstitucional ya que la Constitución de la república, de 1998, en su artículo 246 establecía claramente que la moneda nacional era el ‘sucre’, artículo que nunca se tomaron siquiera la molestia de modificar” (1).

UN BANCO AL SERVICIO DEL PUEBLO, NO ES RETÓRICA

Para enterrar esa negra y triste experiencia de un Banco Central al servicio de los intereses internacionales y de los banqueros corruptos del Ecuador, se requirió de un cambio constitucional y de la suficiente voluntad política para dar un vuelco de 180 grados en la política financiera y cambiaria del país.

En la actualidad, “es un Banco alternativo al anterior que estaba al servicio de los banqueros y del Fondo Monetario Internacional que ocupaba sus instalaciones sin pagar arriendo. Hoy, en contraste, está al servicio de las organizaciones sociales y de las cooperativas”, sostiene Borja.

Además, recaba que se han adoptado una serie de políticas para modernizarlo y de esta manera cumplir a cabalidad una efectiva función social, entre las cuales destaca la puesta en red con los bancos centrales regionales, la integración al Sistema Único de Compensación Regional (Sucre), impulso de mercados virtuales de liquidez para contribuir en forma eficaz al desarrollo social, creando productos orientados a pequeños y medianos inversionistas.

También se recuperó la reserva internacional con cuyos recursos que se canalizan a través de la banca pública, se están financiando proyectos de desarrollo social para amplios sectores del país.

No obstante la dolarización, “vamos a hacer reformas sociales”, dice Borja y por eso otro de los proyectos en que está comprometido a fondo el Banco Central es el de la reforma agraria, mediante la recuperación del suelo, el mantenimiento de la biodiversidad, el agua, el mejoramiento de infraestructura, para lo cual se requiere amplio acceso al crédito por parte del campesino.

“No hay transformación democrática sin reforma agraria”, explica, y reitera que el Banco Central va a ser determinante en su financiación.

Por el nuevo rol que está cumpliendo esta entidad crediticia central en Ecuador, su Presidente colige: “el Banco hoy está al servicio del pueblo, no es retórica”.

LA BANCA CENTRAL Y SU COMPROMISO CON LOS DERECHOS CIUDADANOS

Borja se mostró de acuerdo con sus colegas de Argentina, Arturo O´Conell; Uruguay, Mario Bergara, y Venezuela, José Félix Rivas; quienes coincidieron en que la función de la banca central en los países debe estar estrechamente vinculada a garantizar las políticas sociales y los derechos ciudadanos.

El Consenso de Washington que impulsó el modelo neoliberal prohibió a los bancos centrales financiar a los gobiernos y limitó su papel a luchar contra la inflación.

Frente a esta limitante, los gobiernos se vieron en la necesidad de reemplazar la emisión monetaria por contratación de deuda.

Los bancos centrales fueron precisamente creados para financiar a los gobiernos. El primer organismo de esta naturaleza, el Banco de Inglaterra, fue fundado con el propósito de darle disponibilidad de recursos a la corona británica para la guerra.

Según la receta neoliberal, la banca central tenía que ser independiente, pero la experiencia demostró que ejercía una independencia en lo interno aunque era obsecuente frente a los requerimientos de los organismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.

Con la irrupción de gobiernos progresistas en América Latina, el rol de estas instituciones está cambiando. La visión que tienen estos presidentes de los Bancos Centrales de las naciones suramericanas mencionadas, es que las orientaciones políticas en materia financiera y económica no pueden estar a su cargo.

Por el contrario, explican, su papel es el de estar en consonancia con la política económica que trace el gobierno. La banca central no puede ser otra cabeza de la política económica nacional.

En los países latinoamericanos gobernados por sectores de izquierda y centroizquierda existe la convicción de que la ética de una sociedad se mide en la medida de cómo se trata a la población más desfavorecida, por eso los presidentes de sus Bancos Centrales consideran que tiene una responsabilidad social implícita que implica contribuir a la inclusión social y el acceso de los sectores más débiles a los servicios financieros.

PARA BENEFICIO DE TODOS LOS SECTORES DE LA POBLACIÓN

Diego Borja explica en esta entrevista los alcances de la nueva misión institucional del Banco Central del Ecuador.

- ¿Cómo ha sido la experiencia del nuevo rol constitucional del Banco Central del Ecuador que ahora hace parte del poder ejecutivo?

- La experiencia es que el Banco Central se ha puesto al servicio de toda la nación y de todo el pueblo. El Banco Central tenía una incomprensión, se veía como el banco de los banqueros y actuó de esa manera. En el año de 1999 el traspaso que hizo de recursos a la banca cerrada, a la banca tramposa, fue inimaginable. Hoy día ha cambiado completamente ese rol, es un Banco que se pone al servicio en cuanto al manejo de la liquidez y del sistema de pagos de todos los actores financieros del país: donde está la banca privada, pero donde están también otros, como las cooperativas, las cooperativas no reguladas, las mutuales, las cajas populares, etc.

- Usted ha señalado que uno de los retos del gobierno del presidente Rafael Correa es la puesta en marcha de una reforma agraria. ¿Qué papel va a jugar en este tema el Banco Central?

- Nosotros creemos que no puede haber tierra sin crédito. Ya tuvimos una experiencia anterior en que se repartió la tierra pero al no tener los campesinos acceso al crédito simplemente fracasó. Ahora creemos que buena parte del ahorro nacional que anteriormente el Banco Central lo canalizaba hacia el exterior debe ser dirigido para crédito directo a los productores agrícolas a través del Banco Nacional de Fomento que es nuestro banco, y que debe ser de los campesinos.

- ¿Cuál es el resultado de haber retirado la reserva ecuatoriana de la banca internacional?

- Excelente, es una experiencia que nos ha permitido financiar con nuestro propio ahorro interno el desarrollo nacional. Está ganando en rentabilidad nueve veces más de lo que estaba ganando afuera y tiene mucha seguridad porque está adentro del país y se puede recuperar con mucha facilidad.

- ¿Cómo es el manejo de la política monetaria teniendo una moneda dolarizada?

- Bueno, la dolarización ha significado una camisa de fuerza pero nosotros no nos hemos quedado en los límites que ella nos impone, sino que, más allá de esto, la hemos utilizado, por ejemplo, para tener estabilidad en el poder adquisitivo, lo cual es bueno, y sobre todo para generar mecanismos de flexibilidad de la liquidez. Lo cierto es que con dolarización o sin dolarización vamos a profundizar esta revolución.

- Usted también ha señalado que en estos momentos en su país se está redefiniendo el rol del Banco Central bajo los nuevos preceptos constitucionales. ¿A que apunta ese nuevo objetivo misional del Banco?

- El rol del Banco Central del Ecuador de acuerdo a la nueva Constitución de 2008 es de ejecutor de política monetaria, financiera y crediticia, ya no es más esa autoridad “autónoma” entre comillas que respondía a intereses extraños como el Fondo Monetario Internacional que estaba instalado en sus edificaciones, sino a los legítimamente definidos por la democracia, las elecciones y la Constitución.

- El gobierno ecuatoriano viene abogando por una nueva arquitectura financiera internacional para América Latina. ¿Por qué?

- Porque la crisis económica ha demostrado con absoluta claridad la bancarrota del sistema de gestión económica internacional. América del Sur tiene que ponerse a un lado frente a lo que han sido las soluciones tradicionales y alejarse de los esquemas económicos tradicionales como el Fondo Monetario Internacional, que sólo profundizan los problemas sociales de las naciones subdesarrolladas. Es lo que ha quedado demostrado con los países europeos como Grecia, que afrontan las dificultades económicas por seguir los dictámenes de esta institución. En este país europeo se están llevando adelante las mismas políticas que el FMI propugnaba hace años y que son fracasadas. América Latina no puede repetir eso, porque de lo contrario profundiza la crisis, profundiza el deterioro económico y social de estas sociedades. Tenemos que trabajar con organismos que no nos condicionen la política económica. Por eso el proyectado Banco del Sur, el Fondo Común de Reservas y el Sistema Único de Compensación Regional (Sucre), son herramientas que nos permiten protegernos de la crisis y, al mismo tiempo, concretar la integración financiera.

- ¿Cómo y en forma definitiva, enterrar en el Ecuador “la larga y triste noche neoliberal”?

- Poco a poco con la luz del día que va apareciendo, porque como se decía en la discusión de la izquierda, la revolución es una sucesión de reformas y la consolidación de esa sucesión de reformas. Eso estamos haciendo, todos los días.


1/ Correa, Rafael. Ecuador: de Banana Republic a la No República, Random House Mondadori, enero de 2010.


martes, 12 de octubre de 2010

ECONOMÍA


ENTREVISTA CON EL ECONOMISTA E INVESTIGADOR FABIÁN AMICO

GRACIAS A UN MODELO ANTINEOLIBERAL, LAS PRIORIDADES DE ARGENTINA SON LA DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO Y LAS POLÍTICAS DE DESARROLLO SOCIAL


POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ

Buenos Aires

Los gobiernos de Néstor Kirchner (2003 - 2007) y Cristina Fernández en Argentina han venido impulsado un modelo económico alternativo que está revirtiendo en forma exitosa al neoliberal que llevó a una situación de ruina y desesperanza a ese país y cuyos responsables: la dictadura militar (1976-1983) y los presidentes Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde, no sólo empeoraron las circunstancias sociales de su pueblo sino que quedaron con una gigantesca deuda histórica.

El modelo de los Kirchner, explica el economista e investigador Fabián Amico en diálogo con el Observatorio Sociopolítico Latinoamericano WWW.CRONICON.NET, "ha supuesto como punto de partida, la instauración de controles a los capitales financieros, la minimización del endeudamiento en divisas y el impulso a la inversión pública en infraestructura productiva y social como factores determinantes en la propulsión del desarrollo, así como un nuevo enfoque del rol del Banco Central en el financiamiento de las políticas sociales".


Mediante la reconstrucción del esquema macroeconómico se logró aumentar la rentabilidad del sector manufacturero y el impulso del proceso de reindustrialización de la economía argentina, obteniendo su expansión, y logrando simultáneamente, la reducción del desempleo y el aumento en inclusión social.


HACIA UNA POLÍTICA PRODUCTIVA

No obstante la fuerte oposición, las vehementes críticas de la derecha neoliberal argentina y el cinismo de la dirigencia política y económica que llevó a esta nación a una de sus peores crisis sociales, Amico señala que el gobierno de Cristina Fernández, "avanza en un sendero de mayor diversificación productiva".


Por ejemplo, se viene dando una consolidación de las industrias de mano de obra intensivas como la automotriz y el sector agroindustrial, al tiempo que se impulsa un ambicioso programa agroalimentario, que incluye la participación activa de las provincias, sectores académicos, pequeños y medianos empresarios. En total, participan 43 universidades, 150 cámaras empresariales y 600 productores para convertir a Argentina en una potencia agroalimentaria, siguiendo los pasos de Australia.


La competitividad de las empresas y la multiplicación de la oferta productiva se han transformado en las principales estrategias para combatir la inflación y ampliar el superávit comercial, dos aspectos muy sensibles de la política económica del modelo productivo.

Durante la crisis financiera internacional de 2009, el gobierno de Fernández subsidió más del 2% del total del empleo privado del país, al pagar parte del salario de unos 124 mil trabajadores de empresas privadas. Este subsidio no sólo evitó los despidos masivos, sino que posibilitó a muchas unidades productivas seguir en su respectiva actividad porque de lo contrario, se hubieran visto en la necesidad de cerrar.


INCLUSIÓN SOCIAL

A la par que se implementan políticas para incentivar la industria, la agroindustria y el empleo, el gobierno argentino le ha apostado también a la inclusión social a través de estrategias como el aumento de las jubilaciones y el subsidio denominado Asignación Universal por Hijo que está beneficiando en forma directa a más de tres millones setecientos mil niños que hoy asisten a la escuela y pueden asegurar su alimentación y atención médica.


Los estudios coinciden en señalar que gracias a la política social puesta en marcha por los dos gobiernos de la pareja Kirchner, en Argentina se ha reducido en 70% la indigencia y en 30% la pobreza, lo cual implica que 1.8 millones de argentinos han dejado de ser pobres y 1.5 millones, indigentes. La brecha de inequidad ha caído hasta 14 veces.


RUPTURA CON LA ORTODOXIA NEOLIBERAL

Fortalecer el mercado interno, poner el empleo como prioridad, mejorar los salarios reales y tender a una distribución progresiva del ingreso para impulsar la actividad económica, que es la fórmula que aconseja el Informe de este año que presentó la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD por sus siglas en inglés), es lo que se ha implementado en Argentina desde 2003.


Ello ha ido aparejado con una gran dosis de intervención del Estado, pues la presidenta Cristina Fernández volvió a nacionalizar sectores estratégicos para la economía de la nación como los fondos de pensiones y la empresa Aerolíneas Argentinas, así como recuperó los derechos de transmisión del gran negocio del fútbol para la televisión pública, los cuales estaban monopolizados.


Cambió, también, el enfoque de la política monetaria que ya no solamente se preocupa por la inflación, sino del empleo, el crecimiento y el desarrollo social, elementos que tiene en cuenta ahora en su función el Banco Central, no obstante que su estructura institucional aún sigue siendo la de la infame época neoliberal.


Lo que se ha dado entonces en Argentina, es una categórica ruptura con la ortodoxia neoliberal que le está permitiendo a este país del cono sur crecer a una tasa del 9% en 2010 y reducir sus niveles de inequidad, mediante empleo decente, productividad, fortalecimiento de su mercado interno, políticas de inclusión social y un rol protagónico por parte del Estado.


CAMBIO EN LA POLÍTICA MACROECONÓMICA

Para indagar sobre las características del modelo económico implementado por los Kirchner desde 2003 en la Argentina, dialogamos con Fabián Amico, economista e investigador, profesor de la Universidad Nacional de Luján en Buenos Aires, director de la revista de economía "Circus", e integrante del Grupo de Estudio de Economía Nacional y Popular (GEENap).


- ¿Qué elementos destaca del modelo económico puesto en marcha en Argentina por los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández?


- Una de las cuestiones centrales ha sido el rechazo de cierto consenso dominante (por caso el Consenso de Washington) que todavía hay en América Latina respecto de cómo se debe hacer política macroeconómica. Por ejemplo, en países como Brasil y Colombia la política macroeconómica está consagrada exclusivamente a contener la inflación y no tiene como objetivo prioritario ni el crecimiento del producto, ni del empleo, ni la distribución del ingreso. En contraste, en Argentina ha habido un cambio importante a partir de la crisis del 2001 que ha permitido a la política macroeconómica desarrollar políticas más expansivas aprovechando mucho mejor que el resto de países de la región el ciclo próspero que venía del exterior y eso ha generado tasas de crecimiento que son comparables con China. Este año, Argentina va a crecer por encima del 9%, que es una marca inédita. Una nota predominante en esto ha sido la intervención del Estado en la regulación de los precios básicos de la economía como el tipo de cambio. Este país tiene un tipo de cambio más competitivo que el resto de naciones de América Latina y ha logrado, de alguna manera, amortiguar un poco el impacto que tiene sobre los precios internos los commodities mediante la aplicación de impuestos a las exportaciones, lo que ha generado un ciclo inédito en la demanda agregada argentina, en el proceso de inversión y en el proceso de crecimiento del empleo. Ahora estamos en una coyuntura en que la discusión es la distribución del ingreso y las políticas de desarrollo social.


- ¿El gobierno argentino desechó el modelo de reprimerización del aparato productivo y le está apostando a una política de desarrollo industrial?


- Argentina ha diversificado un poco sus exportaciones a favor de productos con mayor contenido tecnológico pero no ha modificado su estructura si uno lo mira a lo largo de 20 años, pero está en mejores condiciones que otros países de la región porque ha evitado primarizarse más. Brasil, por ejemplo, que era el país de desarrollo industrial más importante de América Latina en los últimos 15 años se ha primerizado en sus exportaciones, cada día más está exportando recursos naturales que industriales, y Argentina en medio de un proceso internacional que llevaba hacia ese camino, ha logrado por lo menos congelar la situación y ahora se esta discutiendo cómo avanzar en un sendero de mayor diversificación productiva.


- ¿La primerización de la economía estanca el sector productivo?


- La primerización de la economía lo que hace es: primero, producir desindustrialización; segundo, produce desempleo en el largo plazo; tercero, ocasiona baja en la productividad en la economía. Además, transforma la economía en una menos competitiva, mucho más frágil y dependiente de los ciclos externos. Argentina vivió eso en los años 30 y en los años 90 del siglo pasado, cuando lo único que exportaba era materias primas y en el momento en que el ciclo se cortaba entraba en una crisis fenomenal. En 2009 a pesar de que sufrió el impacto de la crisis económica internacional, el país pudo manejarla porque el desempleo no subió, los salarios reales siguieron creciendo, y eso es un cambio bastante importante dentro del contexto regional.


- Otro de los enfoques importantes del gobierno de Cristina Fernández es la redefinición del rol del Banco Central de Argentina. ¿Hacia dónde apunta ese cambio?


- Este tema está en proceso de discusión y reformulación en la Argentina. Evidentemente el Banco Central hoy implícitamente está teniendo como objetivo principal el mantenimiento del nivel de tipo de cambio competitivo a través de intervención fuerte en el mercado cambiario y con eso está apuntando a la diversificación industrial de las exportaciones y a la promoción del empleo en el largo plazo. Se están discutiendo detalles más finos como trasladar eso al mandato institucional del Banco que todavía legalmente responde a los criterios típicos del neoliberalismo de los años 90.


- ¿Lo que se busca entonces es institucionalizar ese nuevo enfoque a través de una ley?


- Exactamente, hay un proyecto que cursa en el Congreso que plantea esa reformulación y aunque va ser larga la discusión, estamos en ese proceso.


- Hay sectores de la derecha argentina que critican la política social de asignación universal por hijo, señalando que es simplemente una medida asistencialista. ¿Cuál es su opinión?


- Yo creo que inevitablemente en un proceso de desarrollo en países como los nuestros, las políticas de expansión de demanda agregada no son suficientes para resolver los problemas sociales. En el medio, el Estado tiene que tener políticas sociales para asistir a los sectores que quedan por fuera del mercado, porque, sino, la otra es decirles que se arreglen como puedan hasta tanto los frutos de desarrollo aparezcan dentro de 15 años, como si pudieran esperar todo ese tiempo.


- ¿Precisemos en qué consiste la asignación universal por hijo?


- La asignación universal por hijo consiste en que como hay una porción de la población de chicos que por las características de informalidad del mercado laboral quedaban por fuera de toda cobertura social, el gobierno decidió una política estructural en medio de una política anticíclica para otorgarles una asignación mínima. Como hay contrapartidas, los chicos beneficiados tienen por ejemplo que acreditar que van a la escuela, que son atendido médicamente, lo cual tiene una serie de efectos colaterales muy beneficiosos.


- ¿En el ámbito comercial, Argentina desecha toda posibilidad de suscribir tratados de libre comercio con Estados Unidos o con Europa?


- Hasta el momento sí porque nos parece que son tratados muy asimétricos donde básicamente Estados Unidos impone una condición que es la de apertura de nuestras economías, donde nuestros países no le pueden vender nada y ellos nos pueden vender todo. Son tratados que no son recíprocos, así de sencillo, están basados simplemente en una diferencia de fuerzas fenomenal, entonces en ese marco lo mejor que podemos hacer los países sudamericanos es unirnos y negociar en conjunto, defendiendo nuestras economías, una cosa de pura lógica.

sábado, 9 de octubre de 2010

ECONOMÍA


ENTREVISTA CON EL MINISTRO DE ECONOMÍA DE ARGENTINA, AMADO BOUDOU

“EN AMÉRICA LATINA HAY QUE DEFENDER A LOS PUEBLOS DE LAS CORPORACIONES TRANSNACIONALES”

POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ

Buenos Aires


El poder económico y mediático hoy lo concentran las corporaciones multinacionales, razón por la cual los gobiernos en el caso de América Latina tienen que hacer ingentes esfuerzos para posibilitar dentro de sus países la igualdad de oportunidades y la garantía de derechos de la población, sostuvo en entrevista con el Observatorio Sociopolítico Latinoamericano www.cronicon.net, el ministro de Economía de Argentina, Amado Boudou, durante el acto de apertura del IV Encuentro Internacional de Economía Política y Derechos Humanos, en la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo.

Por esa circunstancia, dijo que se requiere un cambio en la legislación que permita "al Estado defender a los ciudadanos del poder de las corporaciones, enfrentándolas”.

No existe economía sin política


Resalto que en el caso argentino durante los últimos dos gobiernos es la política la que traza la ruta económica y por eso la oposición de los sectores neoliberales que llevaron a la quiebra a este país.

“No existe economía sin política porque la política determina hacia dónde va la economía. El proceso primero de Néstor Kirchner y luego de Cristina Fernández viene a subordinar la economía a la política y estamos orgullosos de este cambio, con la aplicación de políticas populares, gracias a las cuales durante los últimos siete años hemos tenido superávit fiscal y comercial, crecieron las reservas y se mantuvo al dólar estable”, dijo.

Al mismo tiempo destacó que este año la Argentina alcanzará un récord en exportaciones,"lo que resume el modelo económico actual, un modelo que incluye a la industria y al campo a la vez, que es la única manera de dar empleo".

Dos intentos de golpe de Estado

Boudou en desarrollo de su intervención en el foro internacional de la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo denunció que el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner “sufrió dos intentos de golpe de Estado, el primero durante el conflicto con los empresarios del campo y el segundo, en la pelea por las reservas del Banco Central, cuando querían que el Estado se endeudara”.

También señaló que “en este país durante mucho tiempo venía un ministro de Economía y se creía que el mundo empezaba ese día, y así tuvimos hiperinflación, devaluación, corralito y corralón, y en el segundo período de Domingo Cavallo (durante el gobierno de Fernando de la Rúa) nos dejaron hasta sin presidente”.

Las multinacionales tienen más poder que los gobiernos

- Usted ha señalado que hoy los países de América Latina deben enfrentarse no a dictadores o soberanos sino a las corporaciones transnacionales. ¿Esa contundente afirmación no suena a denuncia?

- Sí, hoy los Estados deben enfrentarse a las corporaciones multinacionales porque en realidad su poder económico y mediático, es decir, su poder concentrado, tiene mucho más capacidad que los gobiernos y éstos tienen que hacer esfuerzos muy grandes para posibilitar dentro de sus países la igualdad de oportunidades y la garantía de derechos de la población.

- Pero en su país, hay sectores de la oposición que le hacen el juego a las corporaciones multinacionales…

- Los opositores querían que este Gobierno se fuera y para eso operaban. Por eso estamos atentos y custodios de este proceso que vivimos, porque la oposición deja de hacer política para ser la representación de las corporaciones, no discute un modelo de país y hay fuerzas que quieren detener esta transformación en la que estamos empeñados.

- ¿Cómo fue la experiencia de Argentina en su enfrentamiento con los denominados fondos buitres en el proceso del canje de la deuda?

- La lucha que dio Argentina contra los fondos buitres permitió a la Argentina canjear más el 92% de nuestra deuda con tenedores de buena fe. Solo quedó circunscrita en mínima parte nuestra deuda con los fondos buitres que sabemos que actúan de una forma agresiva y por eso no querían llegar a un acuerdo con Argentina sino que buscaban sacar lo máximo posible sin importarles la situación de nuestro país.

- ¿La Argentina distribuye primero y luego paga su deuda?


-Argentina arrancó el año 2003 con un sinnúmero de problemas como el tema de la deuda, el sistema jubilitario destruido, más del 20% de desempleo, y nosotros lo que hemos ido haciendo es resolver todos estos obstáculos, teniendo siempre en claro las prioridades sociales de nuestro país.


- Uno de los debates en boga en América Latina es el de la independencia de los bancos centrales. Se afirma que son independientes internamente pero obsecuentes en el ámbito internacional. ¿Cuál es su visión al respecto?

- Estoy convencido de que los banco centrales deben ser autónomos pero no autistas, forman parte de las herramientas de la política económica de un país. Uno observa que en los países desarrollados utilizan sus bancos centrales para formular sus políticas, entonces no veo porque nuestros países no puedan hacer lo mismo.


- Algunos medios de prensa internacionales han especulado que la Argentina volvería acudir al Fondo Monetario Internacional (FMI). ¿Es cierta esa versión?

- La Argentina no necesita préstamos del Fondo Monetario Internacional y no acepta sus condicionamientos, ni desde la visión política ni desde la necesidad. A la Argentina le ha ido muy mal cuando el FMI tenía una injerencia en sus políticas y esto tiene que ver con cuestiones macro, como el endeudamiento, pero también con la vida de los argentinos, quienes saben lo que ha significado para ellos el monitoreo de este organismo internacional. Eso no quita que nosotros somos un país que formamos parte del Fondo Monetario y que sigamos llevando nuestra voz para que él se siga transformando.

- ¿Cuál es su principal reto como Ministro de Economía de Argentina?

- Alcanzar el pleno empleo y lograr el 50 por ciento en la relación entre asalariados y capital son los dos pilares que nos hemos propuesto para el país que viene.

- ¿En Argentina, como diría el presidente ecuatoriano Rafael Correa, se acabó “la triste y larga noche neoliberal”?

Sí, claramente

sábado, 2 de octubre de 2010

ECONOMÍA

http://www.cronicon.net/paginas/pensamientoeconomico/inicio.htm

HACIA UN NUEVO PENSAMIENTO ECONÓMICO EN AMÉRICA LATINA




ECONOMÍA


ENTREVISTA CON EL CIENTÍFICO SOCIAL BRASILEÑO THEOTONIO DOS SANTOS

“LA ENTRADA DE CAPITAL INTERNACIONAL NO ES FACTOR FUNDAMENTAL PARA EL DESARROLLO DE AMÉRICA LATINA”

POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ

Desarrollar una política industrial en el ámbito regional de América Latina que redunde en beneficio del progreso social de los pueblos y entierre por fin “la negra noche neoliberal” en la región, planteó el destacado científico social brasileño, Theotonio dos Santos, uno de los exponentes de la Teoría de la Dependencia, durante su intervención en el IV Encuentro Internacional de Economía Política y Derechos Humanos, organizado por la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo de Buenos Aires.

En el marco de este foro académico internacional, el Observatorio Sociopolítico Latinoamericano WWW.CRONICON.NET, tuvo la oportunidad de entrevistarlo para recabar en torno de su propuesta.

Dos Santos considera que en la actual coyuntura regional una política de industrialización debe ir acompañada por el funcionamiento de un organismo financiero como el proyectado Banco del Sur, lo cual posibilitaría, además, el diseño de una estrategia de desarrollo social.

POR UN PROCESO DE INDEPENDENCIA ECONÓMICA

Destacó que los gobiernos progresistas de Latinoamérica están dedicando gran parte de los esfuerzos a tener una cierta independencia económica. Puso como ejemplo el caso de Venezuela, país que gracias a la Revolución Bolivariana, “actualmente hay muchas propuestas y experiencias de profundo sentido social a nivel productivo, como la creación de empresas, en que la idea del planeamiento de la actividad y concepción, parte de una visión solidaria y no de mercado. Esto se está aplicando en sectores significativos. No hay que olvidar –recalcó- que durante 40 años Venezuela fue el mayor exportador de petróleo del mundo y cuando Hugo Chávez llegó al poder encontró al 70% de la población en pobreza”.

La gestión de Chávez, explicó, ha estado dirigida “a la sustitución de una economía rentista del petróleo para una economía productiva, hay un esfuerzo muy grande en esa dirección. Se ha desarrollado un plan de seguridad alimentaria bastante fuerte, pues Venezuela compraba leche y productos lácteos, en este momento está atendiendo su mercado interno e incluso ya se inició la exportación de estos productos, que es una fuente fundamental alimentaria para la población. En infraestructura hay avances en la industria del acero, también un desarrollo grande de las refinerías e industrialización del petróleo y otras inversiones en sectores básicos de economía pesada. El gobierno venezolano está nacionalizando gran parte de ese sector y articulando dentro de un cierto grado de planeamiento”.

TEORÍA DE LA DEPENDENCIA

Este sociólogo y economista brasileño que ha dedicado su vida a la investigación y a la docencia, se ha destacado por sus aportaciones en la formulación general del concepto de dependencia, la periodización de sus diversas fases en la historia de acumulación capitalista mundial, la conceptualización de sus características generales y específicas, y la definición de los mecanismos reproductivos.


La Teoría de la Dependencia que tuvo su auge en las décadas 60 y 70 del siglo XX sostuvo que la estructura interna de los países de la periferia fue forjada a partir de una relación de subordinación con el capital internacional y que la acción de las condiciones externas sobre su proceso de desarrollo en una etapa de predominio de las fuerzas imperialistas y monopólicas en la economía internacional, limitaban grandemente las posibilidades de independencia y progreso social.


En el debate de la Teoría de la Dependencia, se expresaron dos grandes líneas de pensamiento: una de inspiración marxista, en la cual sus exponentes fueron Theotonio dos Santos, Ruy Mauro Marini, Vania Bambirra y en parte André Gunder Frank. Y la otra, de origen weberiana, centrada principalmente en Fernando Henrique Cardoso y Enzo Faleto.


La primera defiende la tesis de la reproducción ampliada de la dependencia dentro del sistema capitalista, de la superexplotación del trabajo, de la tendencia al fascismo, o a los regímenes de contra-insurgencia, por parte de las burguesías locales, sin excluir la presencia de tendencias democráticas y afirma al socialismo como única solución ante las olas de pobreza y miseria generadas por la dependencia. La segunda, aún cuando parte del reconocimiento económico de la situación de dependencia y de la exclusión social que genera, tiende a subordinar las variables específicas de dependencia económica a las variables políticas, negando cualquier componente estructural y cualquier lógica de reproducción ampliada de la dependencia, que substituye por la idea de dependencia negociada. De esta forma, critica los conceptos de superexplotación del trabajo, de tendencia a los regímenes de excepción de la burguesía dependiente y del socialismo como fundamento para resolver la cuestión de la pobreza y la miseria en estas regiones. (Dos Santos, 1996 y 1994).


PERIODO DE REVOLUCIONES Y CONTRARREVOLUCIONES

Sobre la crisis económica que explotó en 2008 y que ha afectado principalmente a Estados Unidos y a Europa, Dos Santos afirma que la misma “demuestra las dificultades del sistema capitalista de gestionar la economía, la sociedad y la cultura contemporánea. La gigantesca intervención estatal en curso no hizo más que reforzar los intereses privados y su capacidad de destrucción de la vida en la tierra: expansión de la pobreza, violencia social creciente, destrucción del medio ambiente y amenaza a la propia sobrevivencia de la humanidad, en tanto que las nuevas guerras son las manifestaciones de la crisis del sistema”.

Advierte que “la coyuntura actual, marcada por la fuerte intervención estatal, no apunta a un periodo de crecimiento sostenido y a cambios estructurales profundos. La recuperación del crecimiento económico en marcha apunta hacia una ‘recuperación rasante’ en los países centrales, mientras la periferia se abre camino al crecimiento y al desarrollo. Pero hay graves límites para un desarrollo sostenible, igualitario, pluralista y democrático en esta nueva coyuntura. Además, la actual ola de innovación tecnológica, en curso desde 1994, se encuentra en su fase final. Ella debe agotarse en 10 a 15 años. La combinación de una nueva crisis coyuntural violenta con una nueva fase depresiva de reestructuración del sistema mundial abrirá un periodo de revoluciones y contra-revoluciones mundiales parecido al que vivimos entre las dos guerras mundiales, pasando por las revoluciones sociales, de un lado, y el acenso del nazi-fascismo, de otro, con un costo de vida colosal para la humanidad”.

DISTRIBUCIÓN EQUITATIVA DEL INGRESO, ELEMENTO ESENCIAL DE UNA POLÍTICA INDUSTRIAL


En esta entrevista, Theotonio dos Santos explica cuáles deben ser los elementos característicos de una política industrial para los países latinoamericanos. Es enfático en señalar que aquellos países que persisten en el modelo neoliberal reprimerizando sus aparatos productivos, muy difícilmente lograrán el desarrollo social de sus pueblos.

Economista y sociólogo, experto en ciencias políticas. Dos Santos, hoy en día es uno de los principales exponentes de la Toería del Sistema Mundial. Máster en Ciencias Políticas por la Universidad de Brasilia, Professor emérito da UFF.Profesor Emérito de la Universidad Federal Fluminense y visitante de la Universidad Federal de Río de Janeiro. Coordinador y presidente de la Cátedra y Red de la Universidad de Naciones Unidas-UNESCO sobre Economía Global y Desarrollo Sustentable. Entre los cargos administrativos que ha ocupado se destacan los de director del Centro de Estudios Socio-Económicos de la Universidad de Chile (CESO); director en la División de Postgrado de Economía de la UNAM (México), del departamento de Doctorado del Seminario Permanente sobre Latinoamérica (México); Consejo directivo del Programa de Postgrado en Ciencia Ambiental de la Universidad Federal Fluminense, y Secretario de Asuntos Internacionales del Gobierno de Estado de Río de Janeiro. Ha sido profesor de las Universidades Nacional Autónoma de México, Illinois, Nueva York, Federal y Católica de Minas Gerais, de Río de Janeiro y del Instituto Bennett de esta misma ciudad.


- Usted en su intervención en Buenos Aires ha propuesto una política industrial para América Latina. ¿Significa ello volver a la estrategia de sustitución de importaciones impulsada por la CEPAL en la décadas de 60 y 70s del siglo pasado?


- Nosotros hemos hecho un análisis bastante más complejo respecto de la sustitución de importaciones de lo que se viene diciendo por ahí. El sistema de sustitución de importaciones está muy dependiente de las exportaciones, porque utiliza sus recursos para poder industrializarse. Si tenemos ese potencial de recursos internacionales a través de las divisas vamos a tener que utilizarlas para importar la maquinaria y los instrumentos que requerimos para nuestro desarrollo. Pero lo que está asociado con la sustituciones de importaciones de esa época es que se confiaba mucho en la fuerza del sector privado y del capital internacional. Había una confianza bastante grande por parte de la CEPAL en la necesidad de atraer el capital del exterior. En la actualidad en América Latina estamos en la disponibilidad de recursos muy grandes; la entrada de capital internacional definitivamente no es un factor fundamental. Claro, desde el punto de vista tecnológico las multinacionales que son dueñas de algunas tecnologías no permiten avanzar sin que se cuente con ellas mediante sus capitales, pero hay una diversificación, incluso en lo que respecta a la industria, China tiene hoy en día un instrumental muy potente y no tiene la necesidad de garantizar que esos recursos se conviertan en expansión de capital chino, entonces es posible llegar a negociaciones muy favorables con ellos, con Japón y con Europa. En ese sentido, podemos utilizar gran parte del conocimiento científico y tecnológico del mundo sin necesidad del capital internacional ya que disponemos en este momento de de recursos importantes que los bancos centrales quieren impedir que utilicemos para nuestro desarrollo.


- ¿Una política de industrialización regional como la que usted plantea, disminuye la dependencia de América Latina?

Mucho, porque tendríamos mercados más amplios y por tanto una escala de producción que va a viabilizar nuestra competitividad en la economía mundial. Ello permitirá entrar con nuestros productos en una disputa de mercados en el mundo.

¿Qué elemento social debe caracterizar una política regional industrial como la que usted propone?

- La distribución equitativa del ingreso debe ser el elemento esencial de una política regional industrial en América Latina, pero al mismo tiempo tiene que ser un factor para reafirmar la soberanía nacional de los países mediante la capacidad de negociación para avanzar en la apreciación de los recursos naturales a través de valor agregado. De esta manera, se logrará el diseño de una estrategia de desarrollo.

- Hay países latinoamericanos como México, Colombia y Perú donde se vuelve a profundizar el proceso de reprimerización de sus economías. ¿Este modelo estanca el desarrollo social?

- Claro, por ejemplo, el caso de Perú con una tasa de crecimiento de 7 y 8% por varios años tuvo dos presidentes que reprimerizaron la economías y salieron del gobierno con 7% de apoyo popular, es decir, el pueblo no vio nada en materia de desarrollo social. El actual Presidente solo cuenta con un 20% lo que significa que la gran mayoría de la gente no está de acuerdo con ese tipo de proyecto económico que fortalece a un pequeño grupo de exportadores dueños de grandes empresas tanto nacionales como internacionales que gracias a los estímulos tributarios del gobierno no transfieren recursos hacia la población.

- ¿Estos países con gobiernos neoliberales no aprendieron la lección de las últimas décadas?

- Así es, porque la fuerte e indiscriminada apertura de América Latina para el capital internacional en las décadas de los años 80 y 90 tuvo como resultado el agravamiento de todos los problemas ligados al subdesarrollo de la región. Todas las instituciones internacionales tienen que reconocer hoy día que en este período no hubo casi ningún crecimiento económico en la región, si lo medimos por la renta per cápita, se agravó dramáticamente la deuda externa de la región a pesar de la cantidad gigantesca de pagos de servicio de la deuda, se retrasó el avance tecnológico y científico y la capacidad de generar conocimiento propio, se mantuvieron las condiciones sociales desfavorables, se afectó la educación, como ha quedado demostrado en los índices de desarrollo humano, en los cuales la región ocupa las posiciones más negativas, solo superadas por algunos países de África y Asia.

- ¿Cuál es la proyección de su país, Brasil, en materia económica e industrial?

- Nosotros estamos en un debate muy fuerte sobre esto. Lo que pasa en este momento es un poco complejo: el Banco Nacional de Desarrollo Económico está haciendo una política de fortalecimientos de grandes grupos económicos en el país para poder confrontarse con la economía mundial. Existe la idea de que es posible tener un desarrollo industrial si el Estado favorece y apoya a esos grandes grupos, eso es muy discutible porque para que estos conglomerados beneficien al grueso de la economía de la nación tendrían que permitir una participación de la población mediante la democratización porque si van a quedar en manos de intereses económicos privados el resultado en el plano de desarrollo interno o internacional difícilmente se revertirá en beneficio del pueblo. Por eso hay que discutir e intentar dar a este proyecto un mayor contenido social.

viernes, 1 de octubre de 2010

ECUADOR


ANTE LA INTENTONA GOLPISTA


LUCIO GUTIÉRREZ Y LOS REZAGOS MAFIOSOS DE LA “PARTIDOCRACIA” TIENEN QUE RESPONDER

POR FERNANDO ARELLANO ORTIZ

Tras la fracasada intentona de golpe de Estado en Ecuador quedó en evidencia la capacidad de perturbación que aún tiene el funesto coronel Lucio Gutiérrez, cuyo gobierno (2003-2005) es de dramática recordación, y al mismo tiempo, la situación desesperada de los rezagos de la mafiosa “partidocracia” derechista que no ha podido recuperarse desde que Rafael Correa Delgado llegó al Palacio de Carondelet.

Pero así como deberán responder ante la justicia los policías sublevados, lo tendrán que hacer también Gutiérrez y su hermano Gilmar, diputado por la derechista formación política Sociedad Patriótica, pues a ellos y a sus camarillas les cabe la responsabilidad intelectual. Cuentan además con la complicidad de la corrupta derecha ecuatoriana que a través de un locuaz títere de los dueños de los principales medios de comunicación, ha comenzado a recoger firmas dizque para buscar la revocatoria del mandato de Correa.


Es evidente también la mano siniestra de Washington. Aunque ya son conocidas sus hipócritas maniobras de prenderle una vela a dios y otra al diablo, y en el caso del secuestro del mandatario ecuatoriano el Departamento de Estado salió farisaicamente a condenar el hecho, es revelador el informe oficial del Ministro de Defensa de Ecuador, Javier Ponce, difundido en octubre 2008 denunciando “que diplomáticos estadounidenses se dedicaban a corromper a la policía y las fuerzas armadas”.


Este informe fue categórico en señalar que unidades de la Policía “mantienen una dependencia económica informal con Estados Unidos, para el pago de informantes, capacitación, equipamiento y operaciones”.

Pero además, los hechos demostraron que algunos sectores de la Policía siguen las orientaciones de Gutiérrez, por eso durante la asonada de Quito, no dejaban de corear: “¡Lucio, Lucio, Lucio!”

Los perpetradores de esta sublevación, con un Presidente secuestrado y sometido a todo tipo de vejámenes, no tienen alternativa diferente a la condena y la prisión. Ni perdón ni olvido, advirtió el presidente Correa, luego de su rescate por tropas militares del hospital policial en el que lo mantenían retenido.


De ninguna manera debe replicarse en América Latina la inicua situación que sucedió en Honduras con el presidente legítimo Manuel Zelaya hace un par de años. En buena hora instrumentos como el de UNASUR y los sectores y organizaciones sociales del hemisferio reaccionaron con prontitud cerrando filas en torno del sistema legítimamente constituido en Ecuador, y el respaldo al gobierno de Correa fue práctico, oportuno e irrestricto.

Cabe esperar que las autoridades ecuatorianas inicien con prontitud las investigaciones, y como ha quedado demostrado que detrás de la rebelión policial estuvo Lucio Gutiérrez, afronte todas las consecuencias. Sería una cachetada de marca mayor no sólo para Ecuador sino para toda América Latina que cualquier país de la región le posibilite a este ex mandatario corrupto y felón la estadía en su territorio o le otorgue asilo, pues marcaría un funeste precedente, como ocurrió durante el gobierno colombiano de Andrés Pastrana Arango (1998-2002) que le dio refugio al esmirriado Pedro Carmona Estanga, quien provocó el golpe frustrado contra el presidente venezolano Hugo Chávez, el 12 de abril de 2002.

En el caso ecuatoriano, fue ejemplar la reacción del pueblo y de los sectores afines políticamente al presidente Correa que en forma decidida salieron a las calles a protestar por el secuestro del mandatario.

El presidente Correa, por su parte, a diferencia de los mandatarios cobardes, corruptos y vendepatria del pasado, como León Febres Cordero, Abdalá Bucaram, Jamil Mahuad y Lucio Gutiérrez, de triste y dramática recordación, que negociaron o salieron de prisa y fugados de Carondelet, dio una gran lección de dignidad, verticalidad y valentía.

En el caso de estos presidentes tiranuelos que dejaron postrado al Ecuador, las masas populares los adversaba, mientras que en la intentona de golpe del pasado 30 de septiembre se demostró una vez más y con creces, el amplio y decidido respaldo que sigue manteniendo Correa.

En esta crisis, por fortuna, no se dejaron pasar las horas, ni se asumió una posición diplomática pasiva por parte de los gobiernos del hemisferio, lo cual hubiera sido un error, tal como quedó demostrado con el golpe de Estado hondureño.

De esta funesta experiencia queda la lección de que si peligra la democracia en un país, peligra en todo el continente. Ecuador y su gobierno pasaron una prueba de fuego, pero quedó claro que hay fuertes enemigos con capacidad muy grande de manipulación y desestabilización. Sin embargo, ellos y todos sus similares en el hemisferio, quedaron notificados: cualquier intento de subvertir la democracia es y será intolerable.